Texto:
“Me has guiado según tu consejo, y después me recibirás en gloria” (Salmo 73:24).
La manera de vivir en esa generación y racionalmente esperar las bendiciones
del cielo es, haciendo la voluntad de Dios; esto es, consultando y aplicando el
consejo divino para cada asunto que se tenga por delante.
El término voluntad es algo más preciso e inmediato y trae la idea de
algo mandado y de inmediato hecho; pero consejo envuelve el concepto de pensar,
consultar, deliberar. Esto nos lleva a inferir que David era un hombre débil y
pecador como nosotros, pero en cada caso se aseguraba que sus hechos eran de
acuerdo al consejo de Dios.
Muchas veces Dios nos habla con suma claridad, pero por la dureza nuestra no
entendemos, se nos hace difícil tomar y aplicar la voluntad del Señor en
nuestras vidas, sobre todo lo relacionado con Su providencia; por eso se
necesita consultar, esto es deliberar y pensar antes de actuar: "Los
pensamientos con el consejo se ordenan" (Pro.20:18). Una bendición para todos
aquellos que quieran ser como David es hacer todo buscando el consejo de Dios.
No te precipites para tomar decisiones, porque el hombre sabio no se apresura.