Texto:
Y le dijeron: Mujer, ¿Por qué lloras? Les dijo: Porque se han llevado a mi
Señor y no se donde le han puesto. Cuando había dicho esto, se volvió, y vio a
Jesús que estaba allí; más no sabía que era Jesús..." (Juan 20:14).
El Señor Jesús está cerca del corazón que le está buscando con amor sincero.
Todos y cada uno de los que buscan al Señor Jesucristo pueden estar en la
absoluta seguridad, que El está cerca de ellos, aun cuando no puedan verlo con
los ojos de la cara, ni con el entendimiento del alma. El pasaje que estamos
considerando es un testimonio más que elocuente de esta consoladora verdad.
Hay varias razones del porque en ocasiones Cristo esconde Su rostro de Su
pueblo. No es porque a El le plazca esconderse de nosotros, de ningún modo, sino
por causa de nuestra debilidad, pero mas particularmente por razón de formarnos
un Cristo de acuerdo a nuestra propia imaginación y no conforme a como El se
nos ha revelado. La mujer samaritana en (Jun.4:25) habló con el verdadero
Mesías acerca de un Mesías dibujado en su propia mente.